Fundamentos
Nuevas formas de producir, trabajar, gestionar, comprar y hasta de recrearse han surgido alrededor de las Nuevas Tecnologías de la Información y Comunicación: las NTICs, que se definen como “sistemas tecnológicos mediante los que se recibe, manipula y procesa información, y que facilitan la comunicación entre dos o más interlocutores” (Hilbert y Katz).
La fusión convergente de las tecnologías de información y divulgación, las tecnologías de la comunicación y las soluciones informáticas en un único sistema, generan una consecuencia directa que es la denominada “Sociedad de la Información y del Conocimiento”.
La economía, la formación, la promoción, la legislación, la cultura y actitudes conforman el entorno de esta Sociedad que está surgiendo, y constituye el punto de partida básico para el desarrollo de la misma.
Las “máquinas herramientas” de la Sociedad de la Información son los programas, (el software). El potencial económico y cultural de una Sociedad no reside en ser capaces de poder pagar por usar los programas, sino en tener la capacidad de desarrollarlos y usarlos libremente.
Coherentes con esta línea surge que el software libre es una oportunidad para que cualquier Sociedad pueda saltar esa brecha digital y no convertirse en simples consumidores de la cultura moldeada por los “creadores del código” (Ricardo Galli).
La condición principal que se evidencia en un primer acceso a la adopción en del software libre en las Universidades Públicas es la económica. El software libre sale más barato que el propietario y, por ende, no es necesario gastar los dineros públicos en algo que no se necesita.
La Universidad Pública Nacional emplea software por el que habitualmente debe erogar importantes sumas en concepto de derechos de uso de dichos programas. La mayor parte de ese software es comercializado bajo el modelo de negocios del software propietario el cual, excepto algunas excepciones, sólo permite ejecutar o hacer funcionar el programa del nivel que se trate, inhibiendo al usuario conocer las instrucciones de su contenido o introducir modificaciones de acuerdo a sus necesidades.
En este sentido, la Universidad Pública debe obedecer a los principios de igualdad y de no discriminación; por lo que se hace primordial que no se favorezca una privatización de facto sobre el acceso a las nuevas tecnologías.
Un usuario no puede acceder a las nuevas tecnologías cuando se le impone un sistema operativo o un software determinado. Si además esa imposición es costosa y compromete recursos innecesarios, se está negando la posibilidad de que, dichos recursos, se empleen para asuntos más perentorios.
La prohibición de acceso tanto al programa fuente, como al código fuente, que constituyen el sistema operativo de la computadora, como a los formatos y aplicaciones, implica una imposibilidad de control por parte del Estado sobre la información propia que disponga bajo soporte digital.
Existen suficientes evidencias que programas operativos de amplia difusión mundial, que durante muchos años se mantuvieron cerrados, una vez liberados o expuestos al conocimiento y análisis público, evidenciaron la existencia de las denominadas "puertas traseras", recursos que permiten redirigir toda la información contenida en una computadora hacia otra computadora, en forma subrepticia y sin que el usuario, que sólo posee una "licencia de uso" pueda advertirlo, quizás a lo largo de toda la vida útil de la computadora.
Otro tanto sucede con los "formatos" que constituyen lenguajes empleados para codificar los datos que se pretendan mantener en soporte digital. En caso que la Universidad no pueda disponer de los parámetros con los cuales han sido desarrollados dicho formatos, queda obligado a depender de una aplicación cerrada para acceder a sus propios datos. Al emplear formatos cerrados, la información volcada por la propia Universidad sólo puede ser decodificada correctamente por el diseñador del formato, sea éste una empresa o persona física de cualquier origen o dimensión.
Como estos formatos cerrados son cambiados periódicamente por los fabricantes, se genera una dependencia tecnológica constante, obligando a la Universidad a actualizar permanentemente las versiones de software que utiliza, con el riesgo de quedar incomunicada en el universo informático como de perder valiosa información disponible, la cual, en la mayoría de los casos, le fuera confiada por los alumnos y docentes por exigencias de distintas areas de la vida universitaria. Estos datos pueden tratarse de información íntima de sus alumnos y docentes, la cual la Universidad tiene la obligación de salvaguardar, como también de información sensible relacionada con cuestiones de gestion Universitaria. Son numerosos los ejemplos ocurridos en países de primer orden mundial donde no ha sido posible recuperar antiguos archivos digitales por haber cesado sus actividades comerciales la empresa fabricante que proveyera el software y desconocerse los formatos empleados en su diseño.
Cuando la Universidad emplea el tipo de herramientas cerradas para intercambiar información digitalizada con otras entidades, termina actuando como promotora del producto de los diferentes fabricantes o como cómplice involuntario de prácticas comerciales indeseables.
Resulta a todas luces discriminatorio e intolerable que para poder acceder a la lectura de un documento producido por un organismo publico se obligue a otro organismo a adquirir un programa cerrado y propietario.
El camino para recuperar el control de funcionamiento de las computadoras en uso en las Universidades es mediante la utilización en cada nivel de productos, de sistemas operativos, formatos y aplicaciones que reúnan las posibilidades de inspección detallada de su contenido, que puedan ser modificados por el usuario y se encuentren disponibles públicamente. Estos productos ya existen desde hace más de una década y se los denomina Software Libre si se trata de los sistemas operativos y aplicativos, Formatos Abiertos cuando se aplica a formatos y, si además constituyen un estándar, se lo denomina Formato Estándar Abierto (OSF).
El Software Libre es desarrollado y perfeccionado constantemente por innumerable cantidad de calificados programadores de todo el mundo que aportan sus conocimientos en forma voluntaria y espontánea, obteniendo productos sumamente estables y de calidad superior a los cerrados o propietarios. Su retribución es el reconocimiento de la calidad de los desarrollos en que hayan participado y la contribución al permitir o facilitar el acceso a la información a millones de ciudadanos del mundo entero, particularmente jóvenes, que no poseen recursos para acceder a programas con licencias de uso pagas. Sus distintos productos se encuentran disponibles en Internet bajo diferentes tipos de licencias, o "libertades" que en general pretenden alcanzar el compromiso de empleo del software en la misma condición en que fue suministrado, inclusive si recibe valor agregado como consecuencia de cualquier modificación efectuada. Este proyecto de alcance universal se denomina GNU y es conocido como "Free Software" por las libertades que otorga, pero no por el precio de cada producto, ya que no siempre el software libre es gratuito.
Aunque algunas áreas de la administración central de nuestro país ya utilizan aplicaciones de software libre, entendemos que la mejor forma de impulsar esta iniciativa debe darse a través de un proceso de concientización colectiva, por el paulatino pero sostenido cambio cultural, la capacitación, y el enriquecedor intercambio de experiencias con aquellos que han logrado éxitos en este emprendimiento.
La adopción de software libre contribuirá a eliminar del ámbito académico el uso de software ilegal, preservando la protección de los derechos de autor y la explotación de la propiedad intelectual, en los términos que contemple cada licencia, previstos en los alcances de las leyes 11.723 y 25.036.
El Estado tiene dentro de las universidades los conocimientos y medios para llevar a cabo este proyecto, cuyo mayor desafío lo constituye la voluntad política y el liderazgo para impulsarlo.
En base a estos principios, el presente proyecto pretende que la Facultad de Ciencias Económicas sea el referente tecnológico para el resto de la Universidad Nacional de Misiones en cuanto a la adopción y uso de esta tecnología. Esta propuesta prevé un período de transición, que implica la preparación de los equipos técnicos, y la consiguiente sensibilización, capacitación y soporte a los usuarios.
1 comentario:
Hola Claudia, posiblemente la conozcas, pero por si no te paso el link de una fundación que se encarga entre otras cosas de difundir y apoyar al software libre: www.vialibre.org.ar.
Otro link que te paso es www.cafelug.org.ar que es una página realizada por un grupo de ususarios de sotware libre de Capital federal. Espero te sirva.. Saludos.
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